SAETAS-U.MINAS: ENCONTRÓ ORO

En un partido parejo y que pintaba para el empate, Unión Minas sacó un triunfazo ante Saetas de Oro de manera agónica. Con el 0-1 en contra, los joyinos deben ganar en la revancha en la altura de Orcopampa para evitar la eliminación.

INCIDENCIAS

Parecía que no habría vencedor ni vencido. Y hasta el aficionado local estaba relativamente satisfecho con el empate que presenciaban entre Saetas de Oro y Unión Minas. Ambos se habían mostrado como fuerzas bastante parejas. Y eso se hizo evidente desde el arranque, con jugadas de peligro en ambos arcos, destacando el trabajo de Washington Peláez en los mineros y el de Akira Kosaka por los joyinos.

Si bien la intensidad bajó en el segundo tiempo, igual la alternancia del dominio no cesó. Por ello, el equilibrio solo podría romperse con una jugada de peligro, o un error insospechado. Esto último fue lo que provocó el posterior lamento joyino, pues a los 88', cuando se daba por descontado el empate, Abraham Vera ensaya una escapada por el lateral sin que Martín Cuadros pueda detenerlo. De inmediato, sacó un centro con veneno que alcanzó a capitalizar el recién ingresado Carlos 'Chin chín' Miranda. Ese tanto puede ser vital para Unión Minas pues retorna a Orcopampa no sólo con la ventaja lograda; sino, con la tranquilidad de saber que en casa podría dar la estocada final -apoyado en la altura- para clasificar nuevamente a una etapa Nacional y poner fin al sueño joyino.

LA ANÉCDOTA

Esta vez no hubo lleno absoluto y, pese a lo atractivo del partido, se vio varios claros en el Estadio Municipal de La Joya. ¿La razón? obviamente el incremento del precio en las entradas -que subieron de 10 a 15 soles- hizo desistir a muchos para ver a Saetas. Por ellos, hubo sí mucha gente apostada en las afueras del estadio, trepados en árboles o en los techos de casas, buses y camiones.

Lo lamentable fue lo que ocurrió sobre el final. Un buen número de espectadores impidió que la terna retornara a los camerinos, pero lo más ilógico fue que hasta el plantel de jugadores de Saetas tuvo que esperar en el centro del campo hasta que la Policía desalojara al público que protestaba contra estos por la derrota. Caso contrario ocurrió con la visita que no tuvo problemas para retirarse del campo de juego. Una reacción muy parecida se dio hace dos años; casualmente también en un Saetas - Minas.

Escrito por: Iván Carpio/DeChalaca.com